No hay nada mejor que decubrir nuevos lugares y nuevos horizontes. a pie, a caballo, en bicicleta, enbarco, con la familia o con amigos, ¡no se olvide de abrir bien los ojos! Quedará entusiasmado con las largas camintas por el monte y con los paseos tranquilos por la playa. Por un lado, el campo le ofrecerá paz y tranquilidad, con sus verdes bosques, largos y ríos, hocez, cascadas y castillos en los alto de las colinas. Y por otro lado, el mar, el océano y la playa le harán disfrutar de largos paseos por la arena y los beneficios de los elementos marinos. La diversidad de paisajes sitisfará todos sus deseos.
De vacaciones en un camping naturista: destinos imprescindibles
En la costa atlántica, podrá descubrir Burdeos, una ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO; la cuenca de Arcachón, la duna de Pilat, los bosques de pinos de las Landas, los pueblos del País Vasco Francés, etc. Cevennes, Gard y la Provenza también le están esperando, con el Pont du Gard, Orange, Nîmes, Avignon... La soleada costa mediterránea le propone visitar la Reserva africana de Sigean, Carcassonne o Narbona. Descubra también Córcega, entre el mar y la montaña, con sus hermosas calas, sus empinados caminos y pintoresctos pueblos. ¿Quiere, en cambio, visitar unas de las ciudades más bonitas y famosas del país¿ París le abre los brazos para que pueda visitar la Torre Eiffle, los Campos Elíseos, Montmartre y muchos otros rincones.
No importa donde decida ir, ya que las experiencias y los recuerdos siempre viajarán con usted.